Cómo recordar lo que has leído

Si bien puede ser fácil para algunos lectores leer y recordar una buena cantidad de lo que leen, ya sea porque disfruten del libro o no, es súper difícil para otros recordar libros, tramas o incluso personajes en la historia.

¿Significa esto que hay algo mal contigo si no puedes recordar todo lo que has leído? ¡Absolutamente no! El cerebro humano es así de complicado y es parte de su mecanismo de defensa dejar ir cierta información para dejar espacio para otros datos. 

Olvidar algo que has leído (incluso si lo has hecho recientemente) es muy común, especialmente entre los lectores ávidos.

En este artículo, echaremos un vistazo más de cerca a algunos consejos y trucos útiles sobre cómo recordar lo que lees, incluyendo las listas de libros que también has leído, lo cual es extremadamente importante.

Si te sientes un poco abatido por este problema, no estás solo: no recordar lo que has leído es un problema real que está privando a la mayoría de las personas de una experiencia de lectura notable.

Entonces, ¿cómo puedes asegurarte de obtener lo mejor de tu experiencia de lectura recordando lo que has leído, ya sea que seas un ávido lector o simplemente estés comenzando? ¡Vamos a averiguarlo!

¿Cómo recordar lo que lees?

No hay una solución universal para recordar lo que has leído. Las personas tienen diferentes preferencias. Prueba los siguientes consejos para descubrir cuál se adapta mejor a tu estilo y necesidades:

1. Toma notas mientras lees

Este es probablemente uno de los métodos más comúnmente utilizados para interiorizar lo que has leído. Es una táctica que la mayoría de los lectores han utilizado principalmente porque es lo que se nos enseñó en la escuela. Aunque este método es bastante antiguo, es efectivo, ya que la mayoría de las personas recordarán los puntos que anotaron en un cuaderno sin demasiado esfuerzo.

Sin embargo, anotar puntos en un cuaderno puede ser agotador para algunas personas. Es por eso que deberías delegar esa tarea a una aplicación de lectura como Basmo.

Gracias a la tecnología, hay una forma más inteligente de tomar notas sin tener que tomar notas en realidad. Además, puedes tenerlas almacenadas en una ubicación centralizada a la que puedas acceder fácilmente en cualquier momento en lugar de estar dispersas en decenas de cuadernos.

Cuando comiences una sesión de lectura en Basmo, tienes la opción de escribir tus pensamientos. Puedes usarlo en cualquier momento durante tu sesión de lectura para escribir tus citas favoritas o algunas notas sobre el libro.

1. Haz clic en el signo + para buscar el libro que estás leyendo actualmente. Aparecerá una lista con posibles títulos y autores de libros.
2. Una vez que hayas encontrado el libro, pulsa sobre él. Para comenzar tu sesión de lectura, pulsa nuevamente y luego el botón de Iniciar sesión.
3. Ahora que se ha iniciado el temporizador, puedes cerrar tu teléfono y empezar a leer tu libro.
4. Cada vez que desees tomar notas, solo tienes que abrir nuevamente la aplicación. Encontrarás una sección especial dedicada a escribir tus pensamientos.
5. Cuando hayas terminado, pulsa en Finalizar sesión, donde puedes establecer una página de marcador para saber dónde dejaste la lectura y ¡listo!

Con Basmo, puedes tomar capturas de pantalla de tus párrafos favoritos y leerlos de nuevo más tarde, una pequeña pero astuta característica que puede transformar tu experiencia de lectura.

2. Visualiza lo que has leído

La mayoría de los libros, especialmente las novelas, no contienen fotos o imágenes como parte de la historia. Leer cientos de páginas de texto sin algún tipo de ayuda visual puede ser desafiante para una parte de los lectores. Para superar esto, debes intentar visualizar tanto como sea posible las cosas que lees.

Esta táctica te ayuda a crear una imagen mental de lo que acabas de leer, lo que facilita recordar partes de la historia, al menos las interesantes o las que son más importantes.

3. Aclara lo que has leído

Si deseas que el libro que acabas de leer se mantenga en tu memoria por más tiempo, trata de evitar pasar por alto los capítulos solo para terminar el libro y tomar el siguiente. A menos que tu objetivo principal sea leer la mayor cantidad de libros posible en un período de tiempo determinado.

«Recordar cómo me siento acerca de ciertas cosas es suficiente. No necesito recordar las cosas en sí mismas también».

Friedrich Nietzsche

Esta cita también se aplica a memorizar lo que has leído. Si puedes recordar cómo te hizo sentir un libro o un capítulo en particular, lo recordarás mejor.

Utiliza Basmo para escribir tus sentimientos. Después de cada sesión de lectura en Basmo, puedes reflexionar sobre lo leído y asignar una emoción a esa sesión. Más tarde, cuando veas la emoción que le has asignado, te será más fácil recordar lo que has leído.

Retener lo que has leído consiste en comprender lo que has leído. Si hay una sección o un capítulo que no has entendido completamente, lee de nuevo para aclarar de qué se trata. No hay absolutamente ninguna necesidad de pasar al siguiente capítulo si las últimas páginas del anterior no tuvieron ningún sentido para ti.

4. Establece Conexiones con Eventos de la Vida Real

Todos tenemos una fuerte conexión con las cosas que amamos. También recordamos fácilmente todas las experiencias positivas que hemos tenido. Claro que también recordamos las malas, pero a menudo de manera menos vívida, es la forma en que nuestro cerebro nos protege del dolor.

Lo mismo ocurre con los libros. Los mejores permanecen contigo por más tiempo.

Usa este truco cerebral a tu favor: intenta establecer similitudes entre lo que lees y tu propia vida. Tal vez algunos de los personajes compartan algunas características contigo o tal vez hayan estado en una situación similar. Quizás una descripción larga sea aburrida y quieras saltarla, pero puede volverse repentinamente interesante si puedes pensar en un lugar de la vida real que se asemeje a lo que estás leyendo.

Haz una nota mental de estas similitudes para cada libro que leas. ¿Quieres recordarlo por aún más tiempo? Haz una nota escrita en Basmo. En Basmo, puedes tomar notas «estándar» o enriquecerlas con fotos o escaneos de tus capítulos o páginas favoritas. ¡Siempre puedes volver a tus notas y refrescar tu memoria!

5. Resalta las secciones importantes

Esta táctica tradicional te ayudará a identificar fácilmente las secciones críticas de la historia que estás leyendo. A medida que lees, resalta las partes del capítulo que creas que son cruciales para la historia.

Estas áreas resaltadas actúan como resúmenes a los que puedes referirte cuando hayas terminado de leer el libro y necesites recapitular lo que has leído.

Pero… ¿qué sucede si el libro que estás leyendo no es tuyo y no puedes resaltar cosas en él? ¿O si simplemente no te gusta hacerlo? Una aplicación de seguimiento de lectura como Basmo es la solución más fácil. El siguiente punto explica cómo puedes hacer esto fácilmente y sin dañar tus libros.

6. Usa una aplicación de seguimiento de lectura

Las distintas tiendas de aplicaciones, como la App Store y la Google Play Store, están llenas de ingeniosas aplicaciones de seguimiento de lectura que pueden ahorrarte el dolor de cabeza de tratar de recordar libros, títulos y tramas que hayas leído. Aunque tendrás muchas opciones para elegir, asegúrate de escoger una aplicación de seguimiento de lectura que se adapte a tu estilo de lectura.

Si quieres resaltar lo que has leído, puedes usar fácilmente Basmo para escanear páginas enteras y luego resaltar todo lo que necesites sin miedo a dañar el libro.

Tu objetivo de lectura también es muy importante, y una aplicación de seguimiento de lectura que te ayude a alcanzar ese objetivo es lo que necesitas. Por ejemplo, la aplicación de Basmo puede ayudarte a establecer y alcanzar tus hitos. ¡Establecer objetivos de lectura anuales y cumplirlos nunca fue tan fácil!

Para establecer objetivos de lectura en Basmo:

1. Ve a la pestaña Objetivos en tu pantalla de inicio. Verás los objetivos de lectura diarios y anuales que se añadieron automáticamente a tu cuenta cuando instalaste la aplicación por primera vez.
2. Para cambiar estos objetivos, simplemente pulsa Ajustar objetivo. Los cambios aparecerán inmediatamente.

7. Crea hábitos de lectura saludables

Tu cerebro ama el orden y la disciplina. Cuanto más hábitos saludables implementes en tu rutina diaria, más fácil te será recordar lo que lees. Aunque los hábitos saludables también incluyen la actividad física, el tiempo al aire libre y comer correctamente, lo más importante en este contexto es tener hábitos saludables de lectura.

A lo que me refiero con hábitos de lectura saludables es a cosas como tener un horario de lectura, leer diariamente, tomar notas diligentemente, tener una lista de lectura e incluso mantener un diario de lectura.

Afortunadamente para ti, para todo esto, puedes usar Basmo, la mejor aplicación de seguimiento de lectura que existe. Basmo es una gran herramienta para el lector moderno porque puede ayudar a hacer la lectura una actividad más divertida, puede aumentar su nivel de retención de información y puede ayudarte a estructurar tus sesiones de lectura de la manera que sea beneficiosa.

Ser organizado y tener una disciplina saludable en tus hábitos de lectura te ayudará a recordar más de lo que lees, especialmente si aprovechas al máximo los beneficios que puedes obtener mediante el uso de Basmo.

8. Lee con atención plena

Mientras que la atención plena como concepto puede ser difícil de entender, su aplicación en la lectura es bastante sencilla. Ser consciente al leer significa hacerlo de manera más consciente de lo que normalmente lo harías. Trata de abordar la lectura como una experiencia, se consciente de sus efectos en ti y en tu bienestar, y absorbe la información que lees a un nivel más emocional.

Ser consciente al leer implica cierto nivel de reflexión sobre lo que lees, tratando de entenderlo a un nivel más profundo: ¿por qué describe el autor las cosas de esa manera? ¿Por qué el personaje principal actúa de esa forma?

Trata de profundizar en la historia y tratar de entenderla en su conjunto en lugar de simplemente pasar por ella. También debes ser consciente de tus propias emociones mientras lees, y aquí es donde Basmo puede ayudarte. Puedes hacer un seguimiento de tus emociones simplemente eligiendo el emoticono que coincida con tu estado emocional al final de cada sesión de lectura dentro de la aplicación.

La lectura consciente también significa absorber información a un nivel emocional, en lugar de tan solo a nivel racional. En otras palabras, en lugar de recordar solo los hechos, al leer con atención plena, también recordarás cómo esos hechos te hicieron sentir. Esto agrega otra capa a toda la experiencia y hace que la información sea más fácil de memorizar y recordar.

9. Participa en la lectura activa

La lectura activa, por definición, es el proceso de leer un material con el deseo y la determinación conscientes de entenderlo y evaluarlo.

Todo el proceso es complejo y requiere de actividades adicionales, como hacer anotaciones, hacer preguntas, buscar respuestas e incluso resumir, pero la más importante en el contexto de recordar más de lo que leemos es la necesidad de tomar notas diligentemente.

Participar en el proceso de lectura y hacer el esfuerzo por entender la información que estamos procesando, hará que sea mucho más fácil recordarla. Las conexiones neuronales formadas en nuestro cerebro serán más fuertes, lo que resultará en recuerdos más duraderos y poderosos.

10. Utilice técnicas de memorización

Nuestra guía para «recordar más de lo que lees» no estaría completa sin las ya famosas técnicas mnemotécnicas.

Estas estrategias de memorización te ayudan a reprogramar tu cerebro para convertirte en una máquina de memorización, a través de varias formas de manipulación del proceso cognitivo científicamente probadas.

Hay muchas técnicas entre las que elegir, pero las más populares y efectivas son:

• The Loci technique (memory palace)
• Chunking
• Spaced repetition

Lo genial de usar técnicas mnemotécnicas para mejorar tu memoria es que no solo son efectivas para recordar cosas en el momento, sino que también tienen un efecto positivo en tu memoria a largo plazo.

11. Explicar lo que lees a alguien más

Te sorprendería saber el efecto que tiene explicar cosas a alguien más en la capacidad de recordarlas. El proceso de tratar de explicar cierta información a un tercero es muy complejo para tu cerebro.

No solo te enfrentarás al desafío de hacer que la otra persona lo entienda, sino que también te verás obligado a procesar la información de una manera completamente diferente, lo que resultará en conexiones neuronales mucho más fuertes y recuerdos más sólidos.

Si no puedes explicarlo de manera sencilla, es que no lo entiendes lo suficientemente bien.

Albert Einstein

Entenderás mucho mejor la información y tendrás más probabilidades de recordarla si también la compartes con alguien más.

12. Conoce tu motivación

Como en todo en la vida, no lograrás nada sin la motivación adecuada y la mentalidad correcta. Conocer tu motivación es la fuerza impulsora detrás de tus esfuerzos para memorizar lo que lees. Una vez que sepas por qué deseas recordar ciertas cosas y por qué crees que las necesitarás en el futuro, el proceso será mucho más fácil y productivo.

13.Comprende el contexto (investiga más)

Una cosa que la mayoría de las personas entiende mal acerca de recordar las cosas que leen es que creen que será más fácil memorizar piezas de información fragmentadas en lugar de ideas más grandes y complejas.

La verdad es que tener una visión general, ver la imagen completa y recopilar información contextual adicional sobre las cosas que leemos tendrá un efecto muy positivo en la facilidad para recordar y recordar información.

Comprender el contexto e investigar más para obtener una mejor visión general de lo que aprendemos obligará a nuestro cerebro a procesar la información a través de una experiencia de aprendizaje mucho más compleja. Esto dará como resultado una mejor memorización y un mayor nivel de comprensión de lo que leemos.

14. No dudes en volver a leer

Algunas cosas simplemente no están destinadas a ser recordadas en el primer intento, sin importar qué tan bien funcione tu memoria. Otras son demasiado complejas para entender y memorizar de una sola vez. No hay que tener vergüenza por repasar ciertas cosas más de una vez, y si eso significa volver a leer el mismo libro o ciertas partes del libro varias veces, que así sea.

Es probable que descubras nueva información o aspectos diferentes de un libro con cada nueva lectura, especialmente si tus intentos están decentemente espaciados.

Cómo recordar la lista de libros que has leído

Aunque las razones mencionadas anteriormente, y otras que no se mencionan aquí, pueden parecer abrumadoras, hay varias formas de recordar la lista de libros que has leído en el pasado.

Para comenzar, prueba algunas de estas tácticas y ve cuál o cuáles funcionan mejor para ti:

Usa un lápiz y un cuaderno

Toma un cuaderno y lleva un registro de cada libro que leas. Actualiza esta lista cada vez que termines de leer un libro. Esto te ayudará a recordar los libros que has leído al echarles un vistazo rápidamente cada vez que lo necesites.

Crea una hoja de cálculo

Si tus habilidades tecnológicas son buenas, entonces debes utilizar este método digital para llevar un registro de todos los libros que has leído. ¿Qué pasa si no te gustan mucho las hojas de cálculo? ¿Quizás te recuerdan demasiado a las tareas de trabajo? Si es así, entonces el buen y viejo cuaderno es tu amigo. ¿O no lo es?

Usa aplicaciones especializadas

Si tomar notas es un gran no para ti y las hojas de cálculo no son lo tuyo, entonces definitivamente debes empezar a usar aplicaciones especializadas de seguimiento de lectura. Estas aplicaciones son ideales para llevar un registro de lo que has leído y lo que planeas leer.

Por ejemplo, Basmo es una aplicación creada para lectores ávidos que quieren asegurarse de recordar todo lo que han leído. Puedes crear listas de libros con solo unos pocos toques e incluso organizar tus libros según el género, el año y otros criterios.

¿Por qué no puedo recordar lo que leo?

Recordar lo que lees es crucial cuando lees por trabajo o para tus estudios. Pero también es importante recordar las novelas que has leído, ¿verdad? ¡Esa es la mitad de la diversión! Aquí hay algunas posibles razones por las cuales no puedes retener todo lo que has leído.

Lo que has leído no es lo suficientemente cautivador

Parte de la razón por la cual no puedes recordar lo que has leído podría ser que las historias no son lo suficientemente memorables y cautivadoras o tal vez solo estás leyendo libros por diversión. Sucede. No todos los libros que lees son memorables.

Desglosemos un poco más, ¿de acuerdo?

Nuestra memoria a menudo nos juega malas pasadas

Verás, la lectura es algo así como un ejercicio complejo principalmente porque implica una función principal de nuestro cerebro: la memoria.

Si bien nuestra memoria no puede retener cada pequeño detalle que le damos, nuestro cerebro elige qué información retener y cuál descartar.

A menos que condiciones tu cerebro para recordar los libros que has leído, es probable que los olvides con el tiempo.

La lectura pasiva no es tu amiga

Otra razón convincente por la cual no puedes recordar lo que lees es que te dedicas a la lectura pasiva donde técnicamente lees el contenido para terminar en lugar de absorber lo que está escrito.

Lo que quieres es ser un lector activo, alguien que tenga la motivación y el deseo de aprender algo de los libros que lee.

Los lectores activos visualizan, aclaran, cuestionan y predicen. También conectan lo que están leyendo con lo que han experimentado, sentido o visto en sus propias vidas. Asimismo, evalúan lo que han leído y desarrollan una opinión al respecto.

¿Tienes demasiado en tu plato?

Una agenda de trabajo ocupada podría ser la razón por la cual recordar lo que lees está resultando ser una tarea difícil. La tecnología también ha jugado un papel importante en complicar nuestras vidas con plataformas como Facebook, Instagram y Twitter arrojando todo tipo de contenido en nuestra dirección, lo que hace que sea súper difícil recordar cualquier cosa realmente.

Por otro lado, la misma tecnología puede ser utilizada para mejorar nuestra memoria o al menos complementar nuestra capacidad para recordar lo que leemos (más sobre esto más adelante en el artículo, así que mantente atento).

Conclusión

Existen decenas de soluciones que ayudan a solucionar el problema más común de los ávidos lectores: cómo retener lo que lees. Si por alguna razón te resulta difícil seguir recordando lo que lees, entonces este artículo debería ayudarte.

No te desanimes si lo primero que intentas no funciona. Todos somos diferentes y cada cerebro reacciona a cosas diferentes. La comunidad de lectores de Basmo jura por probar una combinación de algunos de los consejos y trucos destacados anteriormente para ver cuál(es) te funciona(n) mejor.

¡Inténtalo!

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