¿Cómo desarrollar un hábito de lectura?

Pasarse el tiempo leyendo todos los días suena intimidante, especialmente cuando estamos acostumbrados a estar pegados a una pantalla durante varias horas seguidas. Pero al mismo tiempo, no es necesario leer durante 2 o 3 horas seguidas solo para decir que logramos desarrollar hábitos de lectura.

La mayoría de las veces, integrar 30 minutos en tu rutina matutina o nocturna es más que suficiente para descubrir cómo desarrollar un hábito de lectura.

Además, cultivar un hábito de lectura se siente como matar dos pájaros de un tiro. Por un lado, harás una actividad relajante y divertida en tu tiempo libre y por otro lado, te volverás más sabio y creativo.

Los buenos hábitos de lectura deben ser saludables y realistas. Y la verdad es que solo tú sabes cuánto deberías leer o cómo se ve la rutina de lectura que te sirve mejor.

Cuando planees desarrollar un hábito de lectura, trata de considerar otras cosas como:

• ¿Cuánto deberías leer diariamente?
• ¿Cuándo puedes encontrar tiempo para hacerlo?
• ¿Qué libros pueden ayudarte a mantener el impulso?

¡Pero primero, empecemos desde el principio!

¿Cómo hacer de la lectura un hábito?

Ya sea que porque decidas que es hora de cambiar de ritmo o que quieras construir nuevos hábitos desde cero, hay algunos consejos que debes tener en cuenta:

1. Entender qué son realmente los hábitos

Un hábito se define como un tipo de comportamiento, acción o serie de acciones que tendemos a realizar con cierto nivel de automatismo. Son cosas que hacemos sin pensar demasiado en ellas, son parte de nuestras rutinas diarias, acciones que realizamos simplemente porque se han convertido en una segunda naturaleza.

No piensas mucho en tomar una ducha o cepillarte los dientes. ¿Por qué debería ser diferente la lectura, que es una actividad al menos tan gratificante, necesaria y beneficiosa? La respuesta es corta: no debería serlo.

Para lograr esto, lo primero que debes hacer es simplemente entender qué son los hábitos y cómo se forman. Es cierto que adquirir buenos hábitos es mucho más difícil que adquirir hábitos negativos, pero con la mentalidad correcta y un enfoque estratégico sólido, puedes lograr cualquier cosa. Reconoce tu deseo de convertirte en un mejor lector. Reconoce la motivación detrás de tu intención de hacer de la lectura un hábito diario. Aprovecha tu motivación y úsala como combustible para crear este nuevo hábito.

Tan pronto como tengas una buena comprensión de los hábitos en general y los mecanismos psicológicos detrás de ellos, será mucho más fácil para ti trazar un mapa para tu viaje hacia hábitos saludables de lectura. Haz un plan, establece hitos y celebra cada minuto de este proceso, es una de las mejores cosas que podrás hacer por ti mismo/a.

2. Descubre cuándo te gusta leer

La verdad es que no hay un «mejor momento para leer». Según la agenda, el tiempo libre, las rutinas y las actividades diarias de cada persona, el mejor momento para leer difiere de una persona a otra.

Los investigadores dicen que leer por la mañana es el mejor momento porque te despierta y estimula tu mente. Despertar y hacer tus tareas puede parecer un poco repentino, por lo que tener tiempo para ti mismo/a te hará más productivo/a. Leer por la mañana te dará ese impulso de energía para mantenerte activo/a durante todo el día.

3. Establece una regla diaria de «X minutos»

Si apuntas a un número determinado de minutos para leer cada día, harás un progreso constante y no te sentirás tentado/a a romper tu hábito. Por supuesto, si tienes poco tiempo, ir por un tiempo más largo por sesión podría ser una mejor idea.

Para ayudarte con esto, Basmo te informa cuántos minutos al día debes leer si quieres cumplir tus objetivos de lectura anuales.

4. Bloquea el tiempo de tu sesión de lectura

El mejor consejo para leer eficientemente es establecer un objetivo de cuántas horas te gustaría leer por día.

No pongas la barra demasiado alta, pero tampoco la pongas demasiado baja: el equilibrio lo es todo. Bloquea el tiempo de tus sesiones de lectura para que te sientas cómodo/a con tu objetivo y lo alcances todos los días. Por ejemplo, 7 horas pueden ser demasiado largas, y mantenerse en el plan hasta el final puede ser más difícil de lo esperado.

Con Basmo, siempre puedes ajustar el tiempo que deseas dedicar a la lectura:

1. Simplemente inicia sesión en la aplicación.
2. Toca la sección de Objetivos que ves en la parte inferior de la pantalla.
3. Toca en el texto Ajustar objetivo de la sección Mi objetivo diario e inserta cualquier número de minutos que te haga sentir cómodo/a y emocionado/a por tus hábitos de lectura.

5. La consistencia es la clave

Leer un libro durante 2 horas en el primer día y luego ignorarlo durante otros 5 días no es un hábito de lectura ideal. En lugar de optar por sesiones de lectura largas y difíciles de alcanzar, planifica sesiones más cortas.

Por ejemplo, 30 minutos al día no parecen mucho, pero ser consistente con esos 30 minutos cuenta más a largo plazo que 2 horas de vez en cuando.

Puedes usar Basmo para establecer recordatorios diarios de lectura y recordar tus objetivos de lectura.

6. Usa listas de lectura

La continuidad es esencial cuando se trata de crear buenos hábitos de lectura. Al igual que hacer ejercicio o hacer dieta, todo va bien mientras mantengas un buen impulso. 

Una pequeña pausa, una interrupción o un par de entrenamientos perdidos serán suficientes para interrumpir el hábito y volver a tus viejas costumbres.

Los hábitos de lectura son bastante similares. Si comienzas a perder el tiempo entre libros simplemente preguntándote qué leer a continuación, es probable que pierdas impulso y te resulte difícil volver a leer después de una larga pausa.

Para mantener tus buenos hábitos de lectura y no perder impulso, recomendamos encarecidamente tener siempre listas de lectura actualizadas y cuidadosamente seleccionadas. Tener una lista de «por leer» que nunca logras agotar reducirá el tiempo que pasas entre libros.

7. Limita tus distracciones

Otra cosa que te ayudará a crear el hábito de leer libros es mantener tu teléfono alejado cuando leas. Y estar distraído por tu teléfono porque tienes que dejar tu aplicación de seguimiento de lectura abierta mientras lees suena como la receta definitiva para el fracaso.

Basmo sabe que limitar el tiempo que pasas frente a la pantalla es la clave para una mejor productividad. Una vez que comiences tu sesión de lectura, puedes cerrar tu teléfono. Pero no te preocupes, la aplicación seguirá funcionando en segundo plano para que puedas registrar tiempos de lectura precisos cuando lo desees.

8. Reflexiona sobre lo que lees

Tómate el tiempo para reflexionar sobre lo que acabas de leer. ¿Un párrafo te hizo sentir de una manera concreta? ¿No estás de acuerdo con algo que un personaje hizo o dijo? ¿Un libro cambió tu forma de pensar? ¡No dejes que estas preguntas y sentimientos desaparezcan! Anótalos y guarda estas ideas para conversaciones posteriores con tus amigos.

Con Basmo puedes rastrear tus emociones y reformular esas ideas intrigantes con tus propias palabras: cómo habló un personaje, la perspectiva narrativa, lo que hizo que el autor dijera ciertas cosas, y así sucesivamente.

9. Toma notas mientras lees

Tomar notas es una excelente manera de recordar la información que lees en un libro y tener solo las citas o párrafos más interesantes al alcance de tus manos.

Tomar notas mientras lees es una excelente manera de profundizar en la experiencia. Comprenderás y retendrás más información mientras lees y tomas notas porque el cerebro tendrá que pasar por un proceso mucho más complejo mientras escribes la información que quieres recordar. Concienciarte de los conocimientos adquiridos te dará cierta satisfacción.

Cuanto más veas cómo la lectura mejora tus habilidades mentales y tu conocimiento general, más querrás seguir haciéndolo. Serás consciente de los resultados positivos que la lectura tiene en tu cerebro y te sentirás más inteligente y realizado. Esto te dará un impulso a veces muy necesario para mantener la motivación y mantener o incluso mejorar tus hábitos de lectura.

Con Basmo, puedes escribir notas, escanear, hacer capturas de pantalla y tomar fotos de tus páginas favoritas de un libro. Sí, estos son algunos beneficios adicionales al usar Basmo como rastreador de hábitos de lectura.

Y los pasos son realmente simples también:

1. Inicia sesión en tu cuenta de Basmo.
2. Pulsa sobre el botón + para agregar el libro que estás leyendo actualmente.
3. Presiona el botón Iniciar sesión.
4. Cuando encuentres algo interesante, pulsa en Escanear página.
5. Aquí, tienes la opción de guardar la página como una imagen o solo el texto.
6. ¡Elige lo que desees y disfruta de tu lectura!

10. Prueba cosas nuevas

Si te estás preguntando cómo desarrollar un hábito de lectura, un aspecto clave del proceso es hacerlo interesante. Sí, las rutinas pueden tener un efecto positivo en nuestro estado mental y bienestar general, pero también pueden volverse bastante aburridas después de un tiempo. Tenemos tendencia a buscar emoción de vez en cuando en todo tipo de aspectos diferentes de nuestras vidas y la lectura no es una excepción. Leer el mismo género puede funcionar bien por un tiempo, pero en algún momento, es probable que sientas que necesitas algo más.

Por supuesto, tiene mucho que ver con la personalidad de cada individuo, ya que algunos estarán perfectamente contentos siguiendo la misma rutina durante años. Al igual que ver el mismo programa de televisión una y otra vez tiene un efecto calmante en las personas con ansiedad porque ya saben qué va a pasar y encuentran consuelo en eso, leer el mismo tipo de libro todo el tiempo puede ser reconfortante para algunos.

Pero la mayoría de las personas sentirán la necesidad de cambiar las cosas de vez en cuando en sus hábitos de lectura. Eso es perfectamente normal y es algo que generalmente debes abrazar. Si quieres que tus buenos hábitos de lectura duren toda la vida, deberás aprender a permitirte salir de tu zona de confort de vez en cuando y probar cosas nuevas.

11. Siempre ten libros a mano

El proceso de integrar buenos hábitos en tu vida es similar al proceso de eliminar los malos en cierto sentido. Mientras que parte del esfuerzo para eliminar los malos hábitos se basa en el concepto de «fuera de la vista, fuera de la mente», lo contrario ocurre cuando se intenta introducir buenos hábitos en tu rutina.

Por ejemplo, si quieres comer menos comida basura, una de las primeras cosas que deberías hacer es eliminar las aplicaciones de comida de tu teléfono. Si quieres comer menos azúcares, no deberías tener dulces o galletas a la vista. En su lugar, deberían estar en un cajón o fuera de tu casa por completo.

Por esa misma lógica, los hábitos saludables deben ser alentados haciéndolos lo más accesibles posible. Si quieres hacer más ejercicio, nunca deberías guardar tu bicicleta en un lugar donde sea difícil de ver, alcanzar y sacar. Si quieres usar esa cinta de correr que compraste como parte del propósito de año nuevo del año pasado de ponerte en forma, nunca deberías moverla de su lugar.

Es lo mismo con los libros y la lectura. Si quieres leer más, siempre deberías tener un libro al alcance de la mano. Tener un libro cerca de ti en todo momento hará que sea mucho más fácil para ti crear hábitos de lectura saludables simplemente porque requerirá mucho menos esfuerzo que si tu libro estuviera guardado en un estante.

12. Sé consciente de tu lectura

Vivir un estilo de vida consciente y abrazar el concepto de vivir en el momento es una gran idea en general. Cuando se trata de la lectura, las cosas no son diferentes. La lectura consciente significa estar constantemente consciente de tus sentimientos, tu desempeño y tus hábitos. En general, este es un gran primer paso para mejorarte a ti mismo.

Entender qué influye en tu desempeño de lectura, conocer tus gustos y disgustos, y aún más importante, aprender qué aumenta y disminuye tu productividad o eficiencia va a transformar por completo tus hábitos de lectura.

13. Mantén un registro de tus lecturas

Leer es una buena costumbre, no hay ninguna duda al respecto. Hacer de la lectura una costumbre puede resultar desafiante en las vidas tan agitadas que llevamos. Es por eso que parte de tus esfuerzos para mantenerla deben ser consistentes. 

Saber cuánto lees, con qué frecuencia y con qué eficiencia puede tener un impacto importante en cómo desarrollas los hábitos de lectura que quieres implementar en tu rutina diaria. En primer lugar, llevar un registro de lecturas puede ayudarte proporcionándote información importante sobre las cosas que puedes hacer para mejorar. En segundo lugar, el orgullo que sientes por la lista de libros que has leído, por ejemplo, puede mantenerte motivado para continuar.

14. Únete a un club de lectura

Ser parte de un club de lectura tiene una serie de beneficios para tus hábitos de lectura. Como sabes, los clubes de lectura vienen con reglas específicas que todos los miembros deben seguir para mantener sus membresías. Una cosa increíble acerca de los clubes de lectura es que todos los miembros necesitarán leer un libro específico en un período de tiempo determinado. De una reunión de libro a otra, deberás leer el próximo libro en la lista para que puedas unirte a la reunión y la discusión. 

De esta manera, si estás preocupado por tu capacidad para mantener un hábito de lectura sin motivación externa, los clubes de lectura pueden ser una gran manera de obtener un incentivo.

15. Lee más de un libro a la vez

¿Para qué sirven los hábitos de lectura? Bueno, además de los beneficios para la salud de leer todos los días, lo que definitivamente lograrás al adquirir el hábito de la lectura es leer más. 

Como mencioné antes, la accesibilidad y mantener un buen impulso son críticos para tu hábito de lectura. En interés de no perder tiempo, te recomendamos encarecidamente que no te limites a leer un solo libro a la vez. 

A veces necesitas entender para qué es adecuado cada ambiente. Tu trayecto al trabajo puede ser una gran oportunidad para leer algo ligero o escuchar un audiolibro. Tu hora del almuerzo en el trabajo puede ser otro momento en el que sería una gran idea leer algo que no requiera mucha concentración. Tener y usar tu rincón de lectura en casa es el mejor lugar para hacer una lectura activa. Adáptate a tu entorno y esto te permitirá descubrir fácilmente cómo leer más y cómo mantener tus hábitos de lectura vivos.

16. Ajusta tu rutina y usa el juego de asociación

La mejor y más fácil forma de obligarte a adquirir hábitos saludables es asociarlos con cosas que ya forman parte de tu rutina diaria. ¿Tomas café todos los días? ¿Comes todos los días? ¿Te acuestas a dormir todos los días? Entonces, ¿cómo hacer de la lectura un hábito? Asóciala con algunas de las actividades que ya son parte de tu vida diaria.

Por ejemplo, puedes establecer una regla propia de siempre leer mientras disfrutas tu café matutino. Ese ya es un momento del día que está destinado a una actividad que te brinda alegría y satisfacción. Usa ese momento para leer y asocia el hábito de la lectura con el placer de tomar tu taza de café por la mañana.

Del mismo modo, puedes integrar el hábito de la lectura en tu rutina de dormir. Pasas un tiempo acostado en la cama todas las noches antes de quedarte dormido. Tal vez ves televisión o sueñas despierto. Reemplaza eso leyendo un par de páginas antes de dormir. De esa manera, disfrutarás de un mejor sueño, descansarás más y a la vez crearás un hábito de lectura saludable.

¿Pasas dos horas cada día viajando en tren de ida y vuelta al trabajo? En lugar de mirar por la ventana o desplazarte por las redes sociales en tu teléfono, lee un libro. Realmente puede ser tan fácil.

17. Deja de leer libros que odias

A veces, lo que se interpone entre nosotros y los hábitos de lectura saludables es, sorprendentemente, nuestro deseo de convertirnos en mejores lectores. A menudo, nos encontramos luchando por terminar un libro que no nos trae alegría solo porque tenemos la idea equivocada de que renunciar a un libro que no nos gusta va a tener un impacto negativo en nuestros hábitos de lectura.

De hecho, esta idea es exactamente lo contrario de lo que la realidad nos muestra. Obligarnos a leer libros que no disfrutamos nos hará ir más despacio, leer menos y (potencialmente) nos desanimará a mantener nuestros hábitos de lectura. Es importante deshacernos de malos hábitos de lectura como este.

Por supuesto, eso no significa que debamos renunciar a cada libro que no nos gusta después de leer solo una o dos páginas. Cada libro merece una oportunidad real. Pero si le damos lo mejor de nosotros y aún así no encontramos belleza o interés en él, es mucho más saludable renunciar y probar con el siguiente de la lista.

18. Únete a un desafío de lectura para motivarte

Adquirir el hábito de leer libros puede ser un desafío, especialmente al principio. Necesitarás una motivación clara y fuerte para atravesar todos los cambios que deberán suceder en tu rutina diaria para adaptarte al nuevo hábito que deseas introducir.

A veces eso significa encontrar la motivación dentro de ti y establecer objetivos claros de lectura. Eso es algo en lo que Basmo puede ayudar. Nuestra aplicación de seguimiento de lectura funciona bien como una aplicación para crear hábitos de lectura. Eso es porque puede ayudarte a establecer objetivos de lectura claros y manejables. 

Puedes seleccionar un objetivo diario para la cantidad de minutos que lees cada día o un objetivo general para la cantidad de libros que lees en un año. La aplicación hará un seguimiento de tu progreso hacia el cumplimiento de estos objetivos a través de gráficos y esto puede ser un gran incentivo para trabajar duro y alcanzarlos.

Alternativamente, puedes usar un desafío de lectura como una forma de impulsarte hacia hábitos de lectura saludables. Los desafíos de lectura son competiciones de aprendizaje y lectura generalmente bien organizadas en las que los participantes deben leer una cierta cantidad de libros (generalmente una lista predefinida de libros) dentro de un período de tiempo determinado. Eso puede ser un incentivo divertido y eficiente cada vez que sientas que tu motivación para mantener tus hábitos de lectura comienza a desvanecerse.

19. Ten un compañero de lectura

Tu sistema de apoyo para convertirte en el lector definitivo y tener hábitos de lectura saludables que duren toda la vida puede ser, aunque suene demasiado bueno para ser verdad, uno de tus amigos. Tener un compañero de lectura, un amigo o un miembro de la familia que comparta tu interés por la lectura y hacerlo un hábito diario puede ayudar enormemente. Obtienes a alguien con quien compartir tu lucha, alguien con quien puedes intercambiar ideas, alguien con quien puedes discutir libros y, en última instancia, alguien que te empuje en la dirección correcta cuando las cosas se ponen difíciles.

Tu compañero de lectura y tú pueden compartir experiencias e ideas, pueden experimentar cosas nuevas juntos e incluso pueden desafiarse mutuamente a leer más.

20. Prioriza tus actividades a lo largo del día

El tipo de lector en el que te conviertes es el resultado de una serie de decisiones que tomas a lo largo de cada día. Implementar hábitos saludables de lectura en ti mismo implicará hacer cambios significativos en tu rutina diaria y requerirá que pienses más en cómo gastas tu tiempo.

Convertirse en un lector más dedicado y disfrutar de todos los beneficios que esto puede tener para ti no es tarea fácil, especialmente si consideramos lo agitadas que se han vuelto nuestras vidas y cuántas distracciones nos rodean cada día. Es por eso que parte de tu esfuerzo para implementar hábitos saludables de lectura en tu vida será preguntarte constantemente «¿es esta realmente la mejor manera de gastar mi tiempo?».

A veces, ver la televisión puede parecer una forma relajante de pasar una noche. No requiere esfuerzo, no necesitas concentrarte y parece que quita algo del estrés y la tensión que acumulas durante el día. La dura verdad es que leer un libro es en realidad mucho más relajante que ver la televisión y tiene un efecto mucho más fuerte en la reducción del estrés.

Tendemos a pasar mucho tiempo mirando nuestros celulares todos los días. De vez en cuando, pregúntate «¿qué puedo ganar viendo este video de un gato de 5 minutos?». Tan pronto como esa pregunta aparezca en tu cabeza, te darás cuenta de que esos 5 minutos te traerían muchos más beneficios si los inviertes leyendo.

Prioriza la lectura sobre otras formas de entretenimiento. Es imperativo que te des cuenta lo antes posible en el proceso de desarrollar tus hábitos de lectura que cuanto más leas, más fácil será para ti acostumbrarte a tener esta actividad como parte de tu rutina diaria. Cuanto más leas, más sentirás la necesidad de seguir leyendo.

Conclusión

Cultivar el hábito de la lectura es una práctica diaria y con un poco de ayuda de algunas herramientas y aplicaciones, estarás motivado para leer más. Mantener una lista de todos los libros que has leído y todos los libros que te gustaría leer te da ese cierto sentido de logro.

Además, incluso puedes compartir los libros que estás leyendo en las redes sociales para conectarte con personas que tienen el mismo pasatiempo que tú y luego hablar sobre libros. Después de todo, hablar sobre lo que lees juega un papel importante en cultivar un hábito diario de lectura. Una vez que hayas encontrado a las personas adecuadas con las que hablar sobre los libros que estás leyendo, estarás más motivado para leer.

Compartir ideas interesantes, citas o notas de lectura con otras personas apasionadas por los libros te ayudará a absorber mucha información e inspirarte a mantener tu hábito de lectura. Y como cualquier otro hábito, no olvides ser indulgente contigo mismo: ¡saltarse un día no significa que estás de vuelta en el punto de partida!

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